Bienvenidos

Este sitio está orientado a la educación y la formación ciudadana.
Ubicación: República Argentina, Provincia de Buenos Aires, San Nicolás de los Arroyos.

21 de julio de 2006

La Iglesia salió a defender la ley de Educación que el Gobierno quiere modificar

La Iglesia salió a defender la ley de Educación que el Gobierno quiere modificar: "La Iglesia salió a defender la ley de Educación"

Este es otro ejemplo que muestra que en este país los intereses sectoriales no ahondan en las reales causas del fracaso de la educación. Cada uno "tira para su lado" y nadie dice lo que realmente está pasando.

Se oculta deliberadamente que cualquier ley de educación que tengamos fracasará si no solucionamos los siguientes temas...

1) Solucionar los problemas económico-sociales distribuyendo la riqueza en forma más equitativa solucionando los problemas de supervivencia de la población.
2) Construir una escala de valores en la sociedad en la que la educación sea prioridad junto al esfuerzo y el trabajo.
3) Tener una política cultural seria dirigida a fortalecer el punto 2.
4) Realizar una verdadera capacitación docente y mejorar las condiciones de trabajo de los mismos.
5) Solucionar el tema del financiamiento a la educación.

La Iglesia, como los diversos sectores políticos, utilizan a la educación como prenda política ocultando la necesidad de tener una verdadera política de Estado sobre este tema (y otros también, es decir, un proyecto de sociedad, de país).

Que la Iglesia salga a defender el engendro de la Ley Federal de Educación no puede ser un secreto para nadie; pero que digan que la ley en sí no fracasó y que fue un avance es realmente surrealista, irresponsable, ignominioso y causa indignación. Al decir que hubo problemas en la implementación ya marca un límite virtual con el "ser buenas personas".

La excusa de la mala implementación ya es tan vieja y está tan gastada que nadie debería tenerla en cuenta. Pero alguien (casi innombrable) de la historia dijo: "Miente, miente que algo quedará". Y que sea justamente la Iglesia la que haga esto... en fin... sin palabras. Encima, la Iglesia tiene cientos de escuelas bajo su tutela y que ellos expresen que el problema fue la implementación significaría que ellos mismos no sirven para educar. Entonces, que no se quejen si les sacan la subvención.

Una subvención muy cuestionada. De momento diré lo siguiente (para no entrar, por ahora, en otros aspectos): Se les subvencionan hasta las horas de Catequesis (una barbaridad desde todo punto de vista es el pagar el Estado por algo que ellos hacen todos los días y por eso existen). Se subvencionan horas que no se trabajan, tanto de clases como de cargos. Las inspectoras de gestión privada, muchas veces están con las manos atadas por las presiones políticas y de la jerarquía eclesiásica que sufren día tras día.

Quieren libertad de enseñanza. Bien, está claro y no me opongo. Pero deben cumplir sí o sí con la enseñanza que de los contenidos que son estipulados por la política educativa. Muchas veces no lo hacen, como con el espacio curricular "Salud y Adolescencia".

Saludos.

9 de julio de 2006

Debate por la Nueva Ley de Educación: La Obligatoriedad

Si la educación es un derecho, no hace falta que sea obligatoria. Basta con que el Estado GARANTICE el ejercicio del derecho a todos los habitantes y éstos lo ejercerán si lo consideran necesario y beneficioso. Es decir, si la escuela como institución es buena y tiene beneficios para la persona y la sociedad, la gente "se matará" por ir a la escuela, todos querrán tener un lugar en ella.

Otros derechos existen y no hay ley que exprese que sea obligatorio ejercerlos, por ejemplo, el trabajo. Este derecho no es ni siquiera garantizado por el Estado y ahí tenemos el problema de la desocupación ya que el mercado se beneficia con ella (a mayor demanda de trabajo bajan los salarios).

Imaginemos que tengamos una ley que obligue a todos a ejercer el derecho de navegar o profesar un culto a una personsa que es agnóstica (artículo 14 de la Constitución Nacional).

En todo caso, la obligatoriedad debería ser de los padres/tutores/encargados de los menores a que los envíen a la escuela. Y aún así podría ser cuestinable.

Personalmente pienso lo siguiente...

Suponiendo que no sea obligatorio ir a la escuela y muchos decidieran no hacerlo ¿la convivencia social se vería resentida? ¿Estaría en mayor peligro que hoy?

Por un lado, pienso que me vería perjudicado no solo por la inseguridad, sino porque habría mucha gente que no aprendería cosas básicas para -por ejemplo- votar mejor y me tendría que "comer" malos gobiernos votados por gente muy ignorante.

Por otro, pienso que hoy tengo un alto nivel de inseguridad y he vivido gobiernos horripilantes votados en una sociedad con educación obligatoria.

Entonces, considero que no se debería perder el tiempo yendo a las consecuencias de los problemas. Hay que solucionar las causas y una de ellas es que la escuela como institución no cumple con la función de educar como corresponde (en el sentido de brindar conocimiento). Si solucionamos esto, quizá y sólo quizá, se pueda mejorar nuestra sociedad.

Saludos.