Pasaron otros 4 años y vamos otra vez con lo mismo. Me refiero a que cada vez que se juega, los docentes debemos enfrascarnos, una y otra vez, con las mismas discusiones bizantinas. Por ello, en esta oportunidad, basaré los siguientes párrafos en las notas apuntadas anteriormente (con algunos cambios en la redacción).
En varios países de América latina se está debatiendo el tema de dar asueto o dejar ver los partidos del mundial de fútbol en las escuelas, sobre todo, cuando juega la selección de su país. Es una lástima, pero parece que se debaten frivolidades y nunca las cosas realmente importantes, el debate siempre tiene que ver en cómo "salirnos" de la situación "escuela". Y lo realmente triste es que muchas veces esta situación es fomentada por los mismos docentes. Pero claro, en los "países serios" esta es una situación absolutamente impensable.
Con respecto a Argentina... ¿Cuántos partidos de las selecciones masculina y femenina de hockey se vieron en las escuelas?... Porque hace una semana nuestros equipos lograron llegar al podio... ¿Saben cómo salieron?
Considero que este tema existe porque los medios quieren manejan nuestra vida y si los dejamos, entonces seremos parte de ese "Mundo Feliz" que nadie cree que algún día pueda llegar pero en realidad ya lo estamos viviendo. El fútbol mueve muchos intereses económicos, muchos más que otros deportes. Y cuando el dinero entra a "jugar", el juego pierde protagonismo, tanto como para decidir a los que ganan en una mesa donde se reúnen los representantes de los diversos sponsors ¿o no pasó eso desde el mundial de 1994? ¿Y en los siguientes? ¿Qué sucedió en el partido inaugural del Mundial 2014 cuando el árbitro benefició escandalosamente a Brasil? ¿Ya nadie se acuerda de los escándalos ocurridos en el mundial Corea-Japón?
Creo que ya estamos grandes para "el circo"
Nuestra "identidad" educativa debería estar debatiendo cosas realmente importantes como, por ejemplo, qué proyecto de país, de sociedad queremos y qué proyecto educativo vamos a implementar para el mismo.
No debemos, como docentes, seguir fomentando el "pasatismo" como deporte nacional mientras en los países más desarrollados diseñan satélites a los 16 años; después no nos quejemos de la situación que nos toca vivir, nosotros contribuimos a que sea así.
Pero la realidad es que muchos docentes están especulando con "qué pasará tal día que juega la selección", y los alumnos... ¡ni hablar! Parece que el gran deporte nacional fuera el evadir responsabilidades. Cualquier cosa siempre "es" más importante que cumplir con las obligaciones que tenemos y la actual actitud tomada por las autoridades educativas en cuanto a facilitar y permitir suspender las clases para ver los partidos de la selección nacional de fútbol, significa profundizar una forma de pensamiento y un sistema de valores muy contrarios a la que debemos tener si nuestra intención es solucionar los problemas graves y de fondo que tenemos.
A continuación trascribo argumentos escuchados y redactados por parte de algunos docentes durante estos días para justificar esta situación de barbarie junto a los contra-argumentos que deberíamos tener en cuenta...
Arguemento 1: "Hay que institucionalizar, mediante resoluciones, una realidad que nos es propia; debemos ver los partidos del mundial con los chicos en la escuela".
Contra-Argumento 1: ¿Y las escuelas que no tienen receptores? Además, selecciones nacionales hay de muchos deportes y jamás se les da importancia. Si se les comenzara a dar importancia, ¿cuándo daremos clases si todo el año tenemos actividades deportivas importantes?
Argumento 2: "Es una buena oportunidad para que los profesores de Educación Física vieran el partido con los alumnos, y luego realizar un debate sobre las jugadas, reglamentos, opiniones, etc.".
Contra-Argumento 2: Se puede grabar el partido y el profesor lo puede dar en su hora de clases. Al reglamento ya lo conocen todos los chicos.
Argumento 3: "La realidad nos indica que cuando juega la selección, los chicos, en su mayoría, no van a la escuela. El mal menor es que puedan ver el partido en la escuela así van y la escuela cumple el papel de contención".
Contra-Argumento 3: ¿No será que a muchos docentes les viene bien que los chicos no vayan y no trabajan en cambiar esa mentalidad? Si no la cambiamos, seguiremos igual que siempre. Primero la diversión, bueno, que se diviertan... Mientras en los países desarrollados las cosas que se discuten y debaten son otras muchísimo más importantes. Lindo futuro nos espera con una concepción de escuela como corralito pedagógico, contenedora como casi única función. ¿Aprendizaje cuando se está avalando una práctica social que nos es adversa? Esta es la ideología iniciada con la Ley Federal de Educación que todavía algunos "distraídos" siguen apoyando. Nada de cumplir obligaciones ni adquirir conocimientos estudiando... No, eso es martirizante ¡pobrecitos los chicos!
Argumento 4: "La escuela no debe dar la espalda a lo que significa Identidad Nacional y el fútbol es un elemento que la unifica".
Contra-Argumento 4: Si la identidad nacional se mide por un partido de fútbol, ya mismo comienzo a tramitar la ciudadanía de Omán. Además, ¿el fútbol es la identidad nacional? Parece que muchos docentes deberíamos profundizar el estudio de la sociología. Pero bueno, es parte de la identidad distendernos, distraernos, no cumplir con las obligaciones, seguir disfrutando de la vida, total... cuando no tenga trabajo o me quieran bajar el sueldo, armo un asadito en la ruta y con mis amigos monto un piquete. O paso por la ANSES y lleno unos formularios. En fin, como siempre, el que realmente trabaja y cumple con sus obligaciones es expoliado en nombre de la equidad (pero no se le pide equidad en el esfuerzo del trabajo y la producción a los que reciben dádivas clientelares... Generoso país).
Argumento no escuchado:
"El mundial de Brasil viene bárbaro para analizar realidades socio-económicas conflictivas; busquemos información de por qué tanta gente brasileña está en contra de la organización de este Mundial de Fútbol. Fíjense en las manifestaciones y cómo son reprimidas. ¿Por qué será?".
Para finalizar
A continuación, y para terminar, para aquellos docentes que quieran realizar un análisis sobre este tema envío una propuesta de trabajo... Consiste en responder sólo 6 preguntas.
- ¿Qué define un partido de fútbol? ¿la realidad cambió al terminar el partido?
- ¿Se juega en un partido de fútbol el honor nacional? Si la respuesta es afirmativa, explique también por qué cree usted que las mujeres no son dignas defensoras del honor nacional.
- Haga la comparación entre lo que significa la vida de un futbolista profesional y la vida de una maestra de frontera.
- ¿Considera usted que la realidad del país cambiará luego de terminado el mundial? ¿por qué?
- ¿Cuáles son las implicancias culturales de que el fútbol sea manejado por empresas privadas y no por los socios de los clubes como años atrás?
- ¿A qué se debe que los medios de comunicación se hagan eco de una supuesta pasión nacional por el fútbol masculino descuidando deportes supuestamente femeninos? ¿Y qué podría acotar sobre la sociedad misma en este punto?
Enlace interesante:
- Populismo mundialista, por Lucía Vázquez, Diario La Nación, 18 de junio de 2014
Imagen aportada por Anónimo del 20 de junio de 2014 a las 2:10 en un comentario...