¡Feliz Cumpleaños!
Gracias. Pero, por favor, no sigas.
Sí, ya sé, está enojada...
Martín, lo que sucede es que nada tengo para festejar.
Bueno, no será para tanto. 200 años no los cumple cualquiera ¡festejemos, es el cumpleaños de todos!
Pero es que ¿cómo lo voy a festejar? Unos me lo festejan en un lado, otros, en otro lugar. Veo a mis habitantes divididos ¡nada han aprendido de los dolores que me han causado en el pasado! ¿Por qué no aprenden de la historia?
Creo que la voy entiendo...
Pareciera que la sangre de miles de argentinos en las guerras del siglo XIX entre unitarios y federales ha sido derramada en vano. Hubo más enfrentamientos en diversas épocas que nada bueno me dejaron.
Nada aprendieron del Martín Fierro, hijo predilecto de mi vientre: "Los hermanos sean unidos".
Y si aparecen politiqueros mentirosos que intentan desunir a los argentinos ¿por qué se los escucha, se los apoya y se los vota? ¿Por qué, hijos míos, no paran de pelear y comienzan a construir?
Hay una Constitución Nacional que nadie cumplió ni cumple desde ya hace muchos años. Hay miles de leyes que nadie conoce, todas cambiadas, reformuladas y así no se entienden las "reglas del juego" porque nada está claro.
Y cuando se intenta hacer en democracia una nueva Ley de Medios ¡no respetan la Constitución, hay muchos artículos contrarios a ella! El gobierno se enoja porque algunos jueces suspendieron su aplicación.
Hay millones de habitantes en condiciones de vida indigna. Si alguien lo dice, del gobierno salen a decirles gorilas, que leen Clarín, que miran TN, que son golpistas... Los de la oposición... ¿Para qué gastarme si también caen en los mismos errores? Unos y otros se pelean por el poder pero no para darle un sentido a la vida de los argentinos, parece que sólo quieren el poder para robar, llenarse los bolsillos para tener más poder. ¿No han aprendido que los políticos con poder van y vienen?
Querida Argentina, ahora le entiendo perfectamente. Los argentinos no hemos aprendido a colaborar en nada con nuestros hermanos. La negociación no está presente, sólo la confrontación e imposición. Todavía no se aprendió que los políticos no deben tener el poder ya que el mismo es (o debería ser) del pueblo.
Muchos políticos, de diferentes colores y posiciones, utilizan a los más pobres para ganar votos con infames planes y regalos materiales pero jamás se plantea el desarrollo nacional; que todos puedan tener acceso a un trabajo digno. Pero qué trabajo van a tener si las fábricas se van a Brasil, a Uruguay, a Chile...
Espere, espere... ¡Tenemos varias fábricas!
¡Acá cada día hay menos unidades productivas! Martín, disculpame, pero hace años que en mi suelo no se abre una fábrica de alta tecnología de nada. Ahora están terminando Atucha II ¡que es un diseño de la década de 1960! ¡¿Pero... qué intentan hacer?! En Santa Cruz la presidente puso en marcha la construcción de una central eléctrica a carbón luego de que vetó la Ley sobre Glaciares y Bosques; en la fiesta de mi cumpleaños llenaron todo con muestras regionales para vender en kiosquitos. ¡Cumpleaños eran los de antes! Por ejemplo, en 1910 se realizó todo el año una exposición con los adelantos tecnológicos de la época que estaban difundiéndose por todo el mundo y el país y acá están contentos con la televisión digital para el mundial... Mundial que tendrá partidos de fútbol en las aulas en vez de clases ¡bochornoso!
Y peor aún. En aquél cumpleaños era uno de los centros productores de alimentos más importantes de todo el planeta ¡todas mis hermanas me miraban con gran envidia! Hoy todo sigue igual. Producción primaria como la base económica del país ¡100 años después estamos igual que antes! Me da una rabia...
Parece que todo se permite, hasta que un tipo llegue a presidente luego de ser gobernador y entregar el petróleo, los ferrocarriles, el banco de su provincia ¡y después lo siguen porque tiene un discurso diferente a lo que él mismo hizo! Indignante.
Así, voy a desaparecer del mapa. En el futuro vendrán los planisferios con un agujero en vez de la República Argentina...
Bueno... sí... pero mire que hemos avanzado en leyes sociales y del trabajador...
¡Nada, nada! Es bochornoso ver que tales avances alguna vez existieron y ahora estamos con esa Ley de Flexibilización Laboral votada por los que se dicen representantes del pueblo; esos que se abusan del trabajo honesto, de la necesidad de la gente. Esos sindicalistas millonarios igual que los empresarios inescrupulosos, esos políticos impresentables que apoyaron este desquicio para luego profundizar su clientelismo político indigno.
Y encima, esos sindicalistas fueron votados por los trabajadores. Quizá se deba a que hay un problema grave en el sistema educativo.
¡Después no digas que me enojo por nada! Lo que pasa con la educación es algo que jamás hubiera esperado. Se supone que los docentes saben de educación. Entonces ¿cómo es posible que haya docentes que apoyaron la destrucción iniciada con la Ley Federal? Y no me digas que no es así, porque a todos los argentinos los estoy viendo con mis ojitos y mi alma.
Sí, es verdad. Muchos docentes apoyaron eso. Y también están apoyando lo actual que es lo mismo pero con un lavado de cara. No obstante, usted debe entender que estos docentes, al igual que otros habitantes, apoyan sólo por seguir a un líder buscando la esperanza de mejorar...
¡No me vengas a querer disculpar a esos lacayos del poder de turno! Es imperdonable que haya docentes que apoyen esto y menos aún a un líder porque son ellos los que deben enseñar que jamás hay que apoyar a un líder si quieren defender a la República; porque si lo hacen, imaginate las barbaridades que estarán diciendo en las aulas. Son cosas tan elementales que me da asco que sucedan.
Cambiando de tema ¿vio que aquí tenemos médicos reconocidos mundialmente?
Sí, y me alegro por ellos. Pero son cada día menos. La enseñanza universitaria es muy mala en comparación con lo que tenía hace ya muchos años. Y todo el sistema de salud, en pleno siglo XXI, es deplorable. Siguen los hospitales con graves deficiencias. Siguen con el asunto del negociado de los seguros de salud, obras sociales y hasta co-seguros (pagar 2 veces lo mismo). ¿Cuándo van a entender que con la salud no se juega ni se debe hacer negocio? ¡Hasta medicamentos "truchos"! Muchos médicos saben la verdad acerca de remedios que están siendo probados con mis hijos ¡los usan de conejillos de indias! ¿Por qué tan poquitos salen a decir la verdad sobre la llamada "gripe A" y esa vacuna que ni ellos se aplican? Éticamente, dejan mucho que desear.
Algo al respecto había leído y escuchado de gente conocida... ¡Y qué me dice de los 5 Premios Nobel, creo que es un logro muy bueno!
Sí, claro que me he puesto contenta aunque los de ciencias se hayan ganado por investigaciones en el exterior ¡científicos que se iban del país! Hoy hay más de un millón de argentinos fuera de mi casa ¡más del doble de los argentinos en el extranjero que durante la última dictadura! ¿Te acordás de Favaloro, ese hijo mío tan inteligente que decidió quedarse en el país... Te acordás cómo terminó? Es decir... En vez de aprender, retrocedemos, cada día peor.
¿Y en lo cultural? Tenemos gente reconocida en todo el mundo... Bailarines, músicos, actores... ¡Este año ganamos el Oscar a la Mejor Película Extranjera!
Sería hermoso si todos esos logros los pudiésemos tener aquí, en mi suelo, para todos mis hijos. Me pone muy contenta por los que han sido reconocidos, pero aquí, en mi tierra, estoy observando una caída libre en cuanto a calidad cultural. Lejos han quedado las épocas de gloria de la cultura nacional. La música más escuchada es aquella que pregona la apología del delito o tiene letras que le faltan el respeto a las mujeres ¡y son las que más lo bailan! ¿No tienen dignidad? "Damas Gratis" es un grupo que ha sido vivado en cada presentación ¿tienen idea de qué significa "damas gratis", por qué se dejan denigrar de esa forma? En los teatros sólo veo lleno completo cuando hay desnudos, travestis y humor subido de tono. ¿Y las obras que hicieron historia? La cantidad de libros vendidos es tan escasa que ya ni re-ediciones se realizan y en los niveles superiores de educación estudian sólo con fotocopias. ¡Me acuerdo de EUDEBA en la década de 1960 y me pongo a llorar!
Habría que buscar la raíz del problema para poder torcer el rumbo y construirla a usted como se merece.
Creo que se han perdido valores. Todo da lo mismo. En otras épocas había códigos que todos respetaban. Una escala de valores que presagiaba que yo sería una potencia mundial. El trabajo digno, el esfuerzo personal y grupal, el amor por el prójimo y la justicia; el estudio ¡tantos otros que ya no encuentro por ningún lado!
Les di a mis hijos todos los climas. Ríos, arroyos, lluvias, mares, montañas, llanuras... Tuvieron todo para hacer de mí una gran República con recursos y justicia para todos. ¿Qué hicieron con todo lo que les di? Mi hermanita Japón, pobrecita, nada tenía; una isla siete veces y media más pequeña que yo ¡y sus hijos la convirtieron en una gran potencia mundial!
¿Qué han hecho ustedes conmigo?
¿A quién se le puede ocurrir maltratar así a una madre?