¿Es piratería bajar de Internet una película o un texto para prácticas educativas?
¿Qué hacen muchos docentes?
- Bajan diverso tipo de archivos que pueden servir para sus prácticas educativas y culturales. Un texto, una canción, música, películas, una presentación en PowerPoint, etc.
- Ese material es utilizado para sus clases. Por ejemplo, analizar una película como "Quebracho" para Historia Argentina del siglo XX o un documental de David Attemborough para Biología.
- El docente no cobra dinero por utilizar tales materiales. Algunos podrán argüir que cobra un salario, pero debemos aclarar que el mismo sería cobrado con o sin el material. Es decir, la clase se da igual. Si utiliza materiales bajados de Internet, no es con el fin de ganar dinero extra, sino de abordar los contenidos con mayores posibilidades de acceso al conocimiento y la reflexión.
¿Esos "muchos docentes", son piratas?
- No.
- El pirata es aquella persona que baja libros o películas realizados por otras personas para venderlos y ganar dinero sin el pago de los impuestos correspondientes ni los derechos de autor.
¿Y por qué no compra el material para evitar problemas?
- Hay veces en que el material buscado se puede comprar. No hay problemas con ello.
- Otras veces, el docente no tiene el dinero para hacerlo (recordemos que sus salarios no son buenos).
- Pero muchísimas veces ocurre que el material no existe en el circuito comercial.
- Muchas películas y libros no están a la venta en el país o localidad donde se encuentra. Incluso, tales materiales están fuera del circuito comercial por no haber existencia física del mismo. Por ejemplo, películas y libros que no han sido re-editados. En el caso que existan en otros países (como España o México) muchas veces no es posible comprarlos vía Internet porque sus tarjetas de crédito no los habilitan para tales transacciones o hay regulaciones gubernamentales que traban la importación.
- Un caso específico es el de la película "Almafuerte". Esta película no se encuentra en el circuito comercial. Y si no fuera por la gente que la digitalizó y la subió a Internet, se hubiera perdido y no estaría al alcance de la comunidad educativa.
- Otro caso es el de la película "El día de la falda" que es el año 2008 y, a pesar de ser relativamente nueva, en la República Argentina no se encuentra para poderla comprar.
Los docentes y el compartir materiales
- Un caso paradigmático se establece con Wikipedia. Muchos docentes participan en la elaboración de sus artículos; intercambian conceptos, textos, imágenes, discuten sobre la conveniencia o no de tal párrafo, etc.
- Las entradas existentes en Wikipedia son creadas en forma comunitaria. Y sucede que Wikipedia está en la mira. ¿Por qué? Parece que toca intereses económicos importantes. ¿Se venderán menos enciclopedias en papel por la existencia de Wikipedia? Creemos que sí.
- Entonces, podría suceder que quieran cerrar Wikipedia inventando cargos como el no pagar derechos de autor ya que la comunidad colabora en forma gratuita.
- Existen muchos servidores utilizados por los docentes en los cuales se comparte su propia producción. Apuntes, resúmenes, actividades, textos, videos, etc. Es más, hay docentes con sus propios sitios web o bitácoras que utilizan para compartir sus producciones y experiencias educativas (como este sitio).
Conclusiones:
- No es piratería utilizar materiales (los que sean) para dar clases sin cobrar dinero (o dinero extra).
- La producción humana de cultura debería ser de libre circulación cuando se trate de la educación. Esto no tendría consecuencias negativas en cuanto a los ingresos pretendidos por los autores o creadores. ¿Por qué? Porque las escuelas nunca fueron grandes consumidoras de materiales ya que los gobiernos nunca hay realizado grandes inversiones (necesarias) en libros, música y películas. Y cuando aparece algún plan para realizar equipamiento con algunos materiales, se observa que hay alternativas para que el dinero sea mejor administrado (por ejemplo, el Plan Conectar Igualdad cuyas computadoras tienen instalado el sistema operativo de la empresa Microsoft por el cual se pagaron millones de licencias cuando, en realidad, se podría haber instalado sólo Linux Ubuntu y utilizar el dinero para otros menesteres).
- Si no fuera por las personas que dedican parte de su tiempo en digitalizar diversos materiales (libros, películas, imágenes, etc.), mucho ya se hubiera perdido y no tendría posibilidades de difusión.
- Estamos en una etapa de transición en cuanto a las formas de crear, difundir y plantear el cómo favorecer a los autores respecto de sus obras (cuando viven económicamente de sus creaciones). Si los modelos económicos tradicionales no cambian su forma de organización, caerán por su obsolescencia.